El
tópico de la España de pandereta , flamenco y toros , no nos sirve
ya ni como disculpa, a la hora de interpretar lo que nos pasa .
España ya no es así, ni en ficción. Hoy una españolada de
después de la guerra civil, no aguantaría en cartel, ni el día del
estreno, por que ya no representa la realidad sociológica española,
pero da la sensación que es el fondo velado, de la sarta de
sucesos que nos aquejan. Seguramente por que nuestra casta
político-sindical se ha quedado anclada en Concha Piquer,Marifé de Triana, el
Lute, el Dioni y el crimen de Cuenca, convirtiendo a todos los medios de
comunicación en una síntesis de “ El Caso “ y “La Codorniz”,
que nos mantienen a los sufridos ciudadanos en permanente estado de
congoja y de carcajada, por el papelón de astracanada tragicómica,
que la casta nos está ofreciendo día tras día.
Las
autoridades sanitarias nos ofrecieron estos días pasados, una farsa
teatral disparatada y chabacana en torno a la infección por ébola
de una auxiliar de enfermería, que se había presentado voluntaria
para atender a los dos médicos misioneros que se habían repatriado
enfermos de ébola. Mientras la pobre auxiliar de enfermería se
debate, en angustiosa soledad y aislada, entre la vida y la muerte
, unos mindangos próceres de la sanidad nacional y de Madrid se
preocupan unicamente de que el marrón no les toque a ellos,
pasándole, en forma cobarde , vil y ruínmente, el muerto a la
víctima, para librar su cochino culo, de un bien ganado cese u
obligada dimisión.
Como
en todo gran accidente , no hay una sola causa , sino una
concatenación de fracasos y fallos, que, al unísono, surgen,
produciendo una catástrofe. Aquí falló todo, menos los
profesionales sanitarios y de servicios, que, como se ve , son los
únicos que, además, se juegan la vida .
El
patético espectáculo de las ruedas de prensa de la Ministra y del
Consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid , han infundido un
terrible y alarmante pánico a la población, que iba “in
crescendo” a medida que se iban celebrando ruedas de prensa, que no
pretendían informar, sino enmendar los desastres de las anteriores,
y librarse de las responsabilidades individuales , echando balones
fuera. Era una carrera de la incompetencia y de la miseria personal.
Para mi quedó claro que el diseño político, administrativo y
territorial de nuestro sistema sanitario no es válido, ya que cuando
lo sometes a un esfuerzo crítico , queda paralizado, catatónico, y
sin respuesta coordinada. Una Ministra sin competencias
administrativas ni personales , balbuceante e ignorante , deseando
levantarse e irse a su confortable despacho y un Consejero autonómico
con las competencias , pero sin la calidad personal mínima exigible,
fueron los actores de las bufonadas informativas. Espero que, pasada
la crisis, no duren cinco minutos en sus sillones. La falta unidad
de mando y portavocía única que exige toda crisis , y más las
sanitarias, ha quedado en evidencia y han tenido que darle el mando
a la Vicepresidenta, que resuelve todo lo que se le encomienda . En
este caso funcionará la solución adoptada, por ser la Comunidad y
el Estado gobernados por el mismo partido, pero dudo que se pudiese
formar esa Comisión inter-administrativa, si el problema surgiese,
por ejemplo, en Cataluña , donde el Consejero de Sanidad , es tan
cretino y voceras como el de Madrid, pero no aceptarían la asunción
del mando y coordinación de la crisis por las autoridades sanitarias
del Estado, por que son “ nació”. Las consecuencias de un
descontrol de la crisis vírica, en Cataluña, sin medios y muy torpe
en gestión de la política sanitaria , podían ser bíblicas, para
toda Europa .
Las
competencias en sanidad tienen que ser exclusivas del Estado o
supranacionales, aunque la encomienda de gestión de parte de ellas,
puede estar en las autonomías; pero en casos de crisis las
autoridades nacionales, tienen que asumir rápidamente la dirección
y la coordinación.
No
ha fallado solo la comunicación y la coordinación , sino la
previsión del riesgo evidente de salud pública ante la aparición
del ébola en nuestro País. Desde que en Marzo se confirma la
aparición de una nueva cepa muy letal en Guinea, que en mayo se
detecta en Sierra Leona, que pasa a Liberia , y que está
incontrolada su difusión , hasta que el 2 de agosto USA repatría a
un médico infectado, y el 7 España hace lo mismo con un primer
médico misionero desde Liberia , diagnosticado de ébola y el 8 de
dicho mes de agosto la OMS declara emergencia de salud pública
internacional. En estos 6 meses, estadísticamente se podía prever
que casos aislados podrían aparecer en España y por tanto tendría
que preparar todo un protocolo de actuación, adecuando nuestras
instalaciones sanitarias, adquiriendo equipos y medicamentos ,
poniendo al día los protocolos de control de pasajeros, de atención
sanitaria , formación del personal sanitario y de servicios,
incluidos simulacros, prácticas en centros de Médicos sin Fronteras
, Cruz Roja, Órdenes misioneras e incluso las unidades NBQ del
Ejército, hacer un inventario de especialistas con experiencia en
tratamiento de ébola que están en España, etc, etc. Todo ello para
poder reaccionar rápidamente para detectar lo antes posible a un
potencial infectado, diagnosticarlo, aislarlo y tratarlo , ya que en
España no se había dado ningún caso y nuestro sistema sanitario no
estaba entrenado en este tipo de operaciones con un virus tal letal,
porque, hasta el momento, era una enfermedad circunscrita al
continente africano. Esto es lo que, por ejemplo , se hace ante la
amenaza de aparición de la gripe A ¿ por que no se hizo en
prevención del ébola por el Ministerio de Sanidad ?. Seguramente se
va a hacer ahora atropelladamente ante el tremendo escándalo por
la infección de ébola por la auxiliar de enfermería Teresa
Romero. Este planteamiento es de política sanitaria, lo que hace la
Ministra Mato es solo administración de la sanidad, ¡ pero no se le
pueden pedir peras al olmo !.
Para
mayor escarnio cuando el 12 de agosto fallece el primer médico
misionero Miguel Pajares, aquejado de ébola, en vez de hacerse un
informe exhaustivo del proceso para tomar nota y mejorar los
procedimientos y protocolos , todo el mundo de vacaciones,¡ que es
verano !. El letargo desaparece el 21de septiembre que repatrían al
médico misionero Manuel Garcia Viejo desde Sierra Leona. A propósito
se aclara que la repatriación es práctica habitual en los paises
occidentales. Solo en esta crisis se han repatriado en Europa 8
sanitarios afectados de ébola, además de ser un protocolo de
Médicos sin Fronteras, Cruz Roja y otras ONG.
Hay
un principio en la administración que es: “cuando algo puede
salir mal , antes o después saldrá mal irremediablemente”. Y esto
fue lo que pasó en este caso. Los medios de comunicación dedicaron
a los fallos mucha tinta y horas por lo que me limito a señalar los
que para mi son los decisivos en el fallo de los protocolos:
1º-LAS
INSTALACIONES. Para la repatriación del primer médico misionero
contaminado, aprisa y corriendo se prepararon unas instalaciones en
la 6ª planta el Hospital de Carlos III, antiguamente hospital de
referencia de enfermedades tropicales e infecciosas, desmantelado
desde hace un año por la Comunidad de Madrid, juntamente con sus
equipos especializados y entrenados en el tratamiento de dichas
enfermedades, actualmente dedicado a pabellón de hospitalizados de
mediana y larga duración dependiente del Hospital de la Paz . El
desmantelamiento de las unidades de medicina tropical e infecciosas,
podría justificarse por motivos económicos por un órgano local,
pero es simplemente suicida, sanitariamente hablando, a nivel
nacional. Esta intención , a pesar de esta amenaza viral del ébola,
permanece intacta por el titular del Hospital Carlos III , la
Comunidad de Madrid, ya que al fallecer el primer paciente se
desinstala todo y se vuelve a montar, también de prisa y corriendo,
y cuando se repatría el segundo médico misionero se monta el
tinglado y se desinstalan a su muerte, y se vuelven a montar
rapidamente cuando ingresa la auxiliar de enfermería infectada., con
la provisionalidad alegría y la misma velocidad con que se monta y
desmonta una atracción de fiestas de pueblo. Es una improvisación
injustificable, reiterada, sin propósito de enmienda y posiblemente
dolosa.
Nos
encontramos con unas instalaciones no adecuadas al tratamiento de
paciente infectados por este virus letal que es el ébola, que
provisionalmente podrían haberse mejorado después del fallecimiento
del primer paciente , o del segundo, simplemente abriendo una puerta
a la habitación contigua para instalar el equipo de desinfección y
darle a la esclusa para quitarse el traje de protección más
amplitud que la actual de un metro y medio cuadrado, que dificulta
enormemente la dificil y laboriosa tarea de quitarse el traje,
operación en la que se agudiza el riesgo de contagio , o separando
la recepción de ambulancias que transportan infectados y su
desinfección, el tratamiento de aguas residuales infectadas,
control de sabotajes, etc. El Comité Europeo para el Control de
Enfermedades , incide , más técnicamente en ésta inadecuación del
Hospital Carlos III. Se nota perfectamente que de lo que se trata es
de solventar hoy un problema y terminado éste por fallecimiento o
curación del paciente, nadie piensa en que pueda presentarse otro
caso o casos mañana .
2º.PERSONAL.
El personal sanitario y de servicios auxiliares , se quejan, con
razón, de que , en el mejor de los casos, con una breve sesión
teórica o de demostración de como se pone y quita un traje, o se
reparten unos dibujos ilustrativos , no se solventa la falta de
prática en el uso de equipos o de procedimientos médicos con un
traje puesto, con una temperatura que puede llegar a 45º-50º, y
sobretodo sacárselo después de una sesión de trabajo en la
habitación del paciente , la tremenda deshidratación de 1,5 a 2
litros en media hora, con el agobio y el estrés acumulado lo que
ocasiona un serio trastorno y por eso se exige seguir un estricto
protocolo que dura 15-20 minutos, por lo que se precisa la presencia
de un controlador y de un desinfectador, hasta ahora no
obligatorios, ni eran posibles por lo exiguo de la esclusa , esto
concentra en esta operación un tremendo riesgo de infección , en
caso de un fallo, para actuar rápidamente. Podríamos seguir páginas
y páginas hablando de la detección , diágnóstico transporte y
aislamientos de infectados, proceso que en un caso en USA, muy
similar , se hizo en 90 minutos y aquí en 6 dias, y esto implica
inversiones y formación y entrenamiento de persoanal en toda la
cadena sanitaria hasta el último Centro de Atención Primaria de las
zonas rurales.
Queda
claro que existían protocolos , eso si, no actualizados , no
difundidos, no aplicados ni implementados , pero existían
protocolos. Que con esta organización eran posibles los fallos y
que por tanto estos fallos se produjeron. Que tiene que haber
responsables y debe de exigírseles dicha responsabilidad sea
política , administrativa , e incluso, si se apreciase dolo,
posiblemente penal.La que de ninguna manera es culpable es la auxiliar de enfermera , ya que es la victima.
De
cualquier forma donde hay que combatir el virus de ébola es en
África , donde cohabita, desde 1976, con otras enfermedades
hemorrágicas y otras pandémias, para que no se descontrole y
expanda por todo el mundo. En el fondo hay que luchar por la enorme
injusticia de la vergonzosa pobreza de los pueblos africanos, y eso
hay que hacerlo, por la comunidad internacional, coordinada por las
Naciones Unidas , y no dejarlo solo a la meritoria e inmensa labor
de las ONG y los misioneros, que por la dimensión adquirida del
desastre humano, se ven totalmente desbordados.
Hay que dejar de abusar de Africa |